«No podemos cambiar nuestro pasado. Ni tampoco, el hecho de que las personas actúen de determinada manera. Lo inevitable sucederá. Lo único que podemos hacer es cambiar nuestra actitud. La actitud es más importante que el pasado, el dinero, las circunstancias o lo que las personas hacen o dicen. Es más relevante que la apariencia, los talentos o las habilidades.»
Chuck Swindoll
Los últimos días han ocurrido cambios radicales a nivel social, esto ha desencadenado una ola de energías o vibraciones que van y vienen con variadas frecuencias; positivas, de rechazo, de acción o protección. Estas energías se perciben a nivel colectivo, expandiéndose o modificándose de forma constructiva o no. Las vibras provocan en nosotros emociones las cuales podemos sentir en nuestro cuerpo y pueden dominar nuestras acciones y pensamientos.
No podemos controlar el sentir o no emociones, sin embargo, podemos canalizarlas y generar actitudes positivas y constructivas frente a estas. Tomar control de tu respuesta ante hechos o circunstancias, mejorará tu capacidad de reacción y acción, sentirás que tienes el control de lo que está pasando y podrás proyectar esta calma y control a quienes te rodean.
Los chinos utilizan dos pinceladas para escribir la palabra «crisis». Una pincelada significa «peligro» la otra «oportunidad». En una crisis toma conciencia del peligro, pero reconoce la oportunidad. -John F. Kennedy
- Percibir las señales: Ser perceptivo con lo que está ocurriendo a tu alrededor y anticipar la llegada de imprevistos te ayuda a que tus acciones tengan una mejor oportunidad de ser objetivas y menos emocionales.
- Encontrar las oportunidades: Intenta ver las oportunidades que se encuentran en las crisis o problemas para lograr un cambio positivo. Ese cambio de pensamiento te ayuda en alejarte de cualquier inclinación a desanimarte y acercarte a la solución del problema y la toma estratégica de acciones.
- Mentaliza y proyecta el mejor resultado: Lo más poderoso para crear un desenlace positivo y feliz, es dedicar tiempo y energía para encausar tu frecuencia en que así sea, mentalizar un resultado positivo y proyectar esta energía permite, que quienes te rodean puedan percibir ese impulso y generar los cambios o actitudes que estás buscando.
- Planificar y Actuar: Según la naturaleza de la crisis, los pasos a tomar pueden ser rápidos y fáciles o largos y complicados. De cualquier manera, genera un plan de acción con hitos para cumplir paso a paso. Mantén el enfoque en el resultado deseado y evita los giros emocionales, en especial si te ves envuelto en una situación compleja.
En épocas de crisis, es común caer en emociones negativas y tener reacciones desencadenadas por la frustración y enojo. Si sientes que estas emociones te están invadiendo, puedes respirar profundo y consciente, conectándote con la realidad de la situación, dejando que las emociones fluyan de forma natural y entendiendo él por qué las estás sintiendo.
Ser consciente con nuestras emociones y manejar nuestra actitud contribuye a construir una mejor sociedad, con más amor, respeto y tolerancia.