Un problema global
El calor
- Hidratación constante: Beber agua regularmente es esencial para mantener el cuerpo fresco y prevenir la deshidratación. Evitar bebidas con cafeína o alcohol, ya que pueden aumentar la pérdida de líquidos.
- Ropa adecuada: Usar ropa ligera y de colores claros puede ayudar a reflejar la luz solar y mantener el cuerpo fresco. Además, llevar sombrero y lentes de sol proporciona una protección adicional.
- Evitar la exposición al sol: Buscar sombra y limitar la exposición directa al sol durante las horas más calurosas del día puede reducir el riesgo de golpes de calor. En Chile, actualmente se recomienda no tomar sol especialmente desde las 11:00 a 16:00 hrs.
- Ventilación: Mantener los espacios interiores bien ventilados puede ser crucial para combatir el calor extremo.
- Actividades al aire libre: Si es posible, planifica las actividades al aire libre como salir a juegos infantiles o a realizar deporte, en las primeras horas de la mañana o en las tardes cuando las temperaturas son más moderadas.
- Alimentos: Consume alimentos frescos y que te ayuden a hidratar tu cuerpo como los vegetales y las frutas, especialmente aquellas con mayor cantidad de agua en su interior como la sandía, el melón y la lechuga.
Seamos agentes de cambio
- Optar por formas de transporte más sostenibles, como caminar, andar en bicicleta o utilizar el transporte público, puede reducir significativamente las emisiones de carbono.
- Considerar la posibilidad de utilizar fuentes de energía renovable, como la solar o la eólica, para reducir la dependencia a los combustibles fósiles.
- Adoptar un estilo de vida que priorice la reducción de residuos y el reciclaje puede tener un impacto positivo en la salud del planeta.
- Educar a otros sobre la importancia de la conservación del medio ambiente y promover prácticas sostenibles en la comunidad puede generar un impacto a largo plazo.
- Contribuir a organizaciones y proyectos que trabajen en la protección del medio ambiente puede marcar la diferencia a nivel global.
- Reducir el consumo de productos de origen animal como la carne y sus derivados, puede contribuir a un cambio significativo, ya que la industria ganadera tiene un gran impacto medioambiental.